Contraindicaciones
Hipersensibilidad a cualquiera de los componentes. Asma bronquial o enfermedad pulmonar obstructiva crónica severa, bradicardia sinusal, bloqueo auriculoventricular de segundo o tercer grado, insuficiencia cardíaca no controlada, shock cardiogénico. No se recomienda en pacientes con insuficiencia renal severa porque la dorzolamida y sus metabolitos se excretan por vía renal. Debe emplearse con precaución en pacientes con insuficiencia hepática. Este fármaco puede absorberse sistémicamente, el componente dorzolamida es una sulfonamida y se pueden presentar reacciones de hipersensibilidad a esta. Se debe suspender si aparece conjuntivitis y reacciones en los párpados. No se recomienda la administración simultánea con inhibidores de la anhidrasa carbónica por vía oral. Su efecto se puede potenciar con betabloqueadores orales. Se ha reportado desprendimiento de la coroides con la asociación acetazolamida/ timolol después de procedimientos de filtración. El preservante cloruro de benzalconio, puede depositarse en los lentes de contacto blandos; estos deben colocarse como mínimo 15 minutos después de la aplicación del fármaco. No se ha establecido la seguridad y eficacia en niños menores de 16 años.
Reacciones Adversas
Recordar que el timolol, al ser absorbido en forma sistémica y excretarse en la leche materna, puede producir reacciones adversas graves en los lactantes. La dorzolamida puede producir reacciones locales alérgicas, y como es una sulfonamida que se puede absorber y pasar al torrente sanguíneo, puede ocasionar reacciones adversas iguales a las producidas por otros derivados sulfonamídicos, incluyendo el síndrome de Stevens-Johnson, necrólisis epidérmica tóxica, necrosis hepática fulminante, agranulocitosis, anemia aplásica y otras alteraciones hemáticas. El uso de dorzolamida no ha sido estudiado en pacientes con glaucoma agudo de ángulo cerrado. Los efectos adversos más frecuentemente reportadas fueron: Alteración del gusto (amargo, ácido o sabor inusual) y ardor o sensación de pinchazos en los ojos. Congestión conjuntival, visión borrosa, queratitis superficial y "picazón" ocular (5 y 15%). Entre el 1 y 5%: Dolor abdominal o lumbar, alteraciones oculares a nivel palpebral y conjuntival (blefaritis, sequedad, secreción, lagrimeo, eritema, exudación, dolor o molestia, edema, inyección conjuntival, conjuntivitis) ardor y dolor punzante ocular, erosión y manchas corneales, opacidad del cristalino (núcleo o subcápsular), tos, vértigo, excavamiento glaucomatoso, cefalea, hipertensión, defectos del campo visual, desprendimiento del vítreo. Los siguientes eventos adversos han sido reportados en estudios clínicos y experiencias postcomercialización ( < 1%): Disnea, insuficiencia cardiaca, falla respiratoria, accidente cerebrovascular, hipotensión, dermatitis de contacto, bradicardia, bloqueo cardíaco, dolor torácico, desprendimiento de la coroides posterior a procedimientos, náuseas, depresión, diarrea, sequedad de la boca, iridociclitis, congestión nasal, erupción cutánea, parestesia, fotofobia, urolitiasis y vómitos. Respecto al timolol oftálmico, en pacientes sin antecedentes de insuficiencia cardíaca la continua depresión del miocardio con betabloqueadores (incluido el timolol oftálmico) al cabo de cierto tiempo puede dar lugar a insuficiencia cardiaca. Requieren atención médica: Blefaritis, conjuntivitis o queratitis, rash cutáneo, urticaria o prurito y alteraciones de la visión, ansiedad, dolor en el pecho, confusión, diarrea, mareos, alucinaciones, cefaleas, palpitaciones, bradicardia, náuseas, vómitos, cansancio o debilidad no habituales, sibilancias o disnea.