LANSOPRAZOL LA SANTE

Principio Activo: Lansoprazol,
Acción Terapéutica: Antiulcerosos y antisecretores

Cada Cápsula de LANSOPRAZOL LA SANTE® contiene 30 mg de lansoprazol.

LANSOPRAZOL LA SANTE®, caja por 7 cápsulas de 30 mg (Reg. San. No. INVIMA 2009M-011696-R1). LANSOPRAZOL LA SANTE®, caja por 28 cápsulas de 30 mg (Reg. San. No. INVIMA 2009M-011696-R1).

LANSOPRAZOL LA SANTE® está indicado en el manejo de la úlcera péptica, la esofagitis por reflujo gastroesofágico y el síndrome de Zollinger-Ellison.

La dosis recomendada de LANSOPRAZOL LA SANTE® en adultos es de una cápsula de 30 mg vía oral al día antes del desayuno durante 4 a 8 semanas. En la erradicación del Helicobacter pylori, se recomienda 1 cápsula de 30 mg 2 veces al día, vía oral, junto con 500 mg de claritromicina 2 veces al día y amoxicilina 1.000 mg 2 veces al día durante 10 días.

Hipersensibilidad y/o intolerancia al lansoprazol o cualquiera de los componentes de la fórmula, embarazo, lactancia, menores de 12 años y úlceras gástricas de origen neoplásico o sin diagnóstico definido.

El lansoprazol es un fármaco seguro y bien tolerado. Con mayor frecuencia se han reportado diarrea, rash, prurito, mareo, náuseas, dispepsia, constipación, y cefalea. Con menor incidencia, dolor abdominal, aumento o disminución del apetito, náuseas y vómito. Otros eventos adversos que pueden presentarse son: Artralgias, ansiedad, tos, depresión, mialgias, alteraciones hematológicas, colitis ulcerativa, reacciones alérgicas diversas (incluyendo anafilaxis), eritema multiforme, hepatoxicidad, pancreatitis, síndrome de Stevens-Johnson, necrólisis epidérmica tóxica, parestesias, alteración del gusto, retención urinaria.

En el tratamiento de úlcera gástrica, debe excluirse la presencia de malignidad antes de iniciar la terapia con lansoprazol, ya que se pueden enmascarar los síntomas y retrasar el diagnóstico. Los pacientes tratados con inhibidores de la bomba de protones durante períodos prolongados tienen el riesgo de generar niveles bajos de magnesio sérico (hipomagnesemia), la cual puede manifestarse con alteraciones de la frecuencia cardiaca (palpitaciones rápidas) u otros síntomas como espasmos musculares, temblores o convulsiones. Se recomienda monitorear niveles de magnesio en sangre.