Presentación
CARBAMAZEPINA MK® 200 mg, caja por 30 tabletas retard de 200 mg (Reg. San. No. INVIMA 2009 M-013034-R1). CARBAMAZEPINA MK® 400 mg, caja por 20 tabletas retard de 400 mg (Reg. San. No. INVIMA 2009 M-013171-R1). CARBAMAZEPINA MK® Suspensión al 2%, frasco por 120 ml de suspensión al 2% (Reg. San. 2003 No. M-014599-R1).
Contraindicaciones
Insuficiencia renal o hepática, embarazo a menos que sea absolutamente necesario, lactancia. No debe administrarse concomitantemente con inhibidores de la MAO ni con alcohol, adminístrese con precaución en pacientes con glaucoma, enfermedad cardiovascular y en pacientes con trastornos sanguíneos.
Reacciones Adversas
Arritmias, bloqueo auriculoventricular, bradicardia, edema, hiper e hipotensión, insuficiencia cardíaca congestiva, linfadenopatía, síncope, tromboembolismo, tromboflebitis, ataxia, cefalea, confusión, fatiga, disartria, mareo, meningitis aséptica, neuritis periférica, sedación, alteraciones de la pigmentación de la piel, alopecia, fotosensibilidad, púrpura, erupción, síndrome de Stevens-Johnson (en especial si es asociado al ácido valproico), urticaria, anorexia, estreñimiento, malestar estomacal, náusea, pancreatitis, vómito, falla renal, impotencia, polaquiuria, retención urinaria, anemia aplástica, agranulocitosis, depresión de la médula ósea, eosinofilia, leucopenia, leucocitosis, pancitopenia, porfiria intermitente aguda, trombocitopenia, falla hepática, hepatitis, ictericia, conjuntivitis, nistagmus, opacidades del cristalino, visión borrosa, tos, diaforesis, reacciones de hipersensibilidad, vasculitis y trastornos similares a linfoma.
Precauciones
Adminístrese con precaución en pacientes con enfermedad hepática. Se han reportado alteraciones hematológicas potencialmente fatales, por lo que se recomienda estar atento a signos tempranos, incluyendo fiebre, dolor de garganta, úlceras en la boca, infecciones, producción de hematomas, petequias y hemorragias. La carbamazepina no es efectiva en convulsiones mioclónicas o akinéticas ni crisis de ausencias. En niños con desórdenes convulsivos mixtos, se han observado exacerbaciones de ciertas convulsiones después de iniciar carbamazepina; los adultos mayores en tratamiento con carbamazepina tienen mayor riesgo de un síndrome de secreción inadecuada de aldosterona. Aumenta el riesgo de presentar ideas de autolesión y conductas suicidas. Se deben realizar controles periódicos de cuadro hemático y función hepática.